Salmo 50: Miserere
Texto latino de la Vulgata con traducción literal nueva al español y notas
Psalmus 50 / Salmo 50
«El arrepentimiento y la confesión de David después de su pecado. El cuarto salmo penitencial». 1 In finem. Psalmus David, 2 cum venit ad eum Nathan propheta, quando intravit ad Bethsabee. «Hasta el final, un salmo de David cuando vino a él el profeta Natán después de que David pecó con Betsabé [2 Reyes 12]» (BibliaVulClem 2015, 614). Intravit ad Bethsabee: literalmente: «entró, o penetró a Betsabé».
Texto, introducción y notas
3a Miserére mei, Deus, * secúndum magnam misericórdiam tuam.
3a Ten misericordia de mí, Dios, según tu magna misericordia.

3b Et secúndum multitúdinem miseratiónum tuárum, * dele iniquitátem meam.
3b Y según la multitud de tus conmiseraciones, borra mi iniquidad.
4 Ámplius lava me ab iniquitáte mea: * et a peccáto meo munda me.
4 Lávame aún más [con más amplitud] de mi iniquidad: y límpiame de mi pecado.
5 Quóniam iniquitátem meam ego cognósco: * et peccátum meum contra me est semper.
5 Porque yo conozco mi iniquidad: y mi pecado está siempre contra mí.
6 Tibi soli peccávi, et malum coram te feci: * ut iustificéris in sermónibus tuis, et vincas cum iudicáris.
6 He pecado solo contra ti, y he hecho el mal ante ti: para que seas justificado en tus palabras y venzas cuando seas juzgado.
7 Ecce enim, in iniquitátibus concéptus sum: * et in peccátis concépit me mater mea.
7 Pues he aquí que he sido concebido en iniquidades: y en pecados me concibió mi madre.
8 Ecce enim, veritátem dilexísti: * incérta et occúlta sapiéntiæ tuæ manifestásti mihi.
8 Pues he aquí: has amado la verdad: las cosas inciertas y ocultas de tu sabiduría me has manifestado.
9 Aspérges me hyssópo, et mundábor: * lavábis me, et super nivem dealbábor.
9 Me aspergerás con el hisopo y seré limpio: me lavarás y seré blanco más que la nieve.
10 Audítui meo dabis gáudium et lætítiam: * et exsultábunt ossa humiliáta.
10. Gozo y alegría darás a mi audición, los huesos humillados [que han sido humillados] exultarán.
11 Avérte fáciem tuam a peccátis meis: * et omnes iniquitátes meas dele.
11 Retira tu faz de mis pecados: y borra todas mi iniquidades.
12 Cor mundum crea in me, Deus: * et spíritum rectum ínnova in viscéribus meis.
12 Crea en mí un corazón puro, Dios: e innova [altera introduciendo novedades] un espíritu recto en mis vísceras [entrañas].
13 Ne proícias me a fácie tua: * et spíritum sanctum tuum ne áuferas a me.
13 No me arrojes de tu faz: y no me quites tu santo espíritu.
14 Redde mihi lætítiam salutáris tui: * et spíritu principáli confírma me.
14 Devuélveme la alegría de tu salvación: y confírmame [asegura en mí] con espíritu principal.
15 Docébo iníquos vias tuas: * et ímpii ad te converténtur.
15 Enseñaré a los inicuos tus vías: y los impíos se convertirán a ti.
16 Líbera me de sanguínibus, Deus, Deus salútis meæ: * et exsultábit lingua mea iustítiam tuam.
16 Libérame de las culpas de sangre, Dios, Dios de mi salud: y mi lengua exultará tus justicia.
17 Dómine, lábia mea apéries: * et os meum annuntiábit laudem tuam.
17. Señor, abrirás mis labios: y mi boca anunciará tu alabanza.
18 Quóniam si voluísses sacrifícium, dedíssem útique: * holocáustis non delectáberis.
18 Porque si hubieras querido un sacrificio, ciertamente te lo habría dado: tú no serás deleitado con holocaustos.
19 Sacrifícium Deo spíritus contribulátus: * cor contrítum, et humiliátum, Deus, non despícies.
19 Un sacrificio a Dios [es] un espíritu atribulado: un corazón contrito y humillado, Dios, no despreciarás.
20 Benígne fac, Dómine, in bona voluntáte tua Sion: * ut ædificéntur muri Ierúsalem.
21 Benignamente actúa, Dios, en tu buena voluntad [para con] Sión: para que sean edificados los muros de Jerusalén.
21 Tunc acceptábis sacrifícium iustítiæ, oblatiónes, et holocáusta: * tunc impónent super altáre tuum vítulos.
21 Entonces aceptarás un sacrificio de justicia, oblaciones y holocaustos: entonces pondrán sobre tu altar tus vítulos.
Introducción
«Cuando Dios mismo acusa y nos pone delante los pecados, el hombre solo puede reconocerse culpable; pero puede apelar a la “misericordia de Dios”» (Schökel 1987, 143).
El trasfondo del Salmo 50 es que Dios, por medio del profeta Natán, acusa a David y le pone delante sus pecados. En nuestros días se oye mucho la expresión «No me arrepiento de nada». Especialmente suena en la televisión y en los medios de comunicación, en boca de famosos y políticos. David parece que se no arrepentía ni de su homicidio (propiciando la muerte de Urías, su general) ni de su adulterio (con Betsabé, la mujer de Urías), hasta que Natán le contó la parábola del rico que por puro capricho roba y sacrifica la única corderita de su vecino pobre (2 Samuel 12: 1-24).
Dios, por medio de Natán, fuerza el examen de conciencia de David y este entiende que la única salida para él es la misericordia de Dios. ¿Se repite la actuación de Dios con David con cada uno de los humanos porque Dios propicia o propiciará nuestro correcto examen de conciencia? ¿Se repetirá en el juicio final? Si es así, la expresión «no me arrepiento de nada» se destapa como peligrosa falacia y más vale ir sintonizando con las medidas de David descritas en este Salmo 50 una vez que cayó en la cuenta de sus barbaridades.
Notas
Texto latino de la Vulgata. Traducción literal al español de José Manuel Grau Navarro. Para la bibliografía y las abreviaturas usadas: <https://lotrives.substack.com/p/bibliografia-de-lotrives>.
ámplius
Comparativo del adv ample (amplius, amplissime) [amplio, más amplio, amplísimo].
iustificéris
de iustifico (act) iustificari (pas). Iustificéris es 2 p sg pres subj pas. Iustificari es «ser hallado justo, ser reconocido como justo y como tal presentarse», v. también cum iudicáris.
cum iudicáris
iudicáris 2 p sg pres subj pas; iudicare (act), iudicari (pas). Cum iudicáris: «cuando tú [Dios] seas juzgado»: es decir, «cuando se ponga en duda tu justicia». «David reconoce su pecado y pide perdón por él para que se subraye expresamente la justicia de Dios. Las palabras ut iustificéris etc. las emplea san Pablo en la epístola a los Romanos (3: 4) para mostrar que precisamente por la incredulidad y la infidelidad de los judíos aparece en su correcta luz la justicia de Dios» (Hoberg 1906, 181).
spíritu principáli
Las traducciones literales establecidas son «con un espíritu de príncipe (o de señor, de dueño» (Kahl 2021, 174-5). BibliaVulClem (2015, 615) traduce «con un espíritu perfecto».